En Génesis 2 vemos el inicio del hombre. Dios coloca a Adán en el jardín del Edén, donde crecía toda clase de árboles. El capítulo nos dice que Dios puso al hombre ahí para cultivar la tierra y cuidarla. Podía comer de sus frutos y de esa manera tendría alimento. Dios se aseguró que al hombre no le haga falta nada de lo que necesita. Desde el principio, Dios pensó en el bienestar integral del ser humano, incluyendo su sustento diario. Esa verdad sigue vigente hoy, incluso en medio del desempleo.
Es importante recordar que uno de los objetivos del diablo es debilitar tu fe, desestabilizar tu vida y alejarte del amor de Dios. Una situación de desempleo puede ser una herramienta que utiliza para sembrar desesperanza, ansiedad y dudas, especialmente al no tener ingresos fijos. En medio de esa vulnerabilidad, es fácil sentir que Dios está distante, pero la verdad es que Él sigue presente, cuidándote y deseando caminar contigo.
Desafortunadamente, a veces las cosas no salen como se espera. El desempleo es un problema crítico que afecta a las sociedades de todo el mundo, con amplias implicaciones para las personas que lo sufren. Recientemente, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada reportó que hay cerca de 2.4 millones de hondureños que no tienen una situación de empleo estable. Se refieren a pocas horas laborales, salario inferior al mínimo o hasta el total desempleo. Este último afecta actualmente (2023) a 250,000 hondureños. Más allá de las cifras, cada caso representa una historia real, una lucha diaria y un impacto profundo en la vida personal y familiar.
En medio del desempleo, es fácil caer en pensamientos que dañan tu autoestima o te hacen dudar de tu valor y del cuidado de Dios. También podrías sentir culpa, inseguridad o incluso enojo con Él.
El dinero suele ser el método con el cual se obtienen necesidades básicas como vivienda y alimentación, entonces al no tener un ingreso empiezas a preocuparte enormemente. Esta preocupación puede llevarte a la desesperación, duda y problemas familiares, haciéndote sentir que estás en una situación en la cual no hay salida.
En estos momentos de incertidumbre, Filipenses 4:6-7 te recuerda que no debes inquietarte o preocuparte. Más bien te incita a orar y pedirle a Dios. Jeremías 29:11 dice que Dios tiene planes buenos para tu futuro. Estas promesas siguen siendo ciertas en tiempos de desempleo. Puedes confiar en Dios y creer que Él cuida de ti pues Él ya conoce tus necesidades (Mateo 6:8).
No temas, porque yo estoy contigo. No tengas miedo, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, y también te ayudaré. También te sustentaré con la diestra de mi justicia.
Isaías 41:10
Como en cada prueba, Dios puede moldear tu carácter y activar tu fe mientras pasas por esta temporada. Él tiene un plan para tu carrera que traerá satisfacción y gloria para Su nombre. A continuación, te compartimos una guía que puede ayudarte durante este proceso:
Buscar a Dios es crucial.
Mateo 6:33 - Más bien, buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Sé responsable. Busca activamente trabajo. No te quedes esperando a que las cosas sucedan por sí solas.
Eclesiastés 11:6 - Por la mañana siembra tu semilla, y hasta el atardecer no dejes reposar tu mano; porque no sabes cuál es lo que prosperará, si esto o aquello, o si ambos a la vez serán buenos.
Sé paciente. Este proceso puede tomar tiempo y mucha energía. No te rindas, confía en el tiempo de Dios.
Isaías 40:31 - pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas: correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán
Busca apoyo / comunidad. Dios pone personas a tu alrededor que te pueden dar fortaleza y te ayudan a levantar las manos cuando estás cansado.
Gálatas 6:2 - Llevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo.
Es importante mantenerse firme durante este proceso. Colosenses 3:23-24 dice que hagas todo de corazón, para el Señor y no para los hombres. Así recibirás la recompensa de la herencia. Dios puso talentos y habilidades en ti. Haz tu mayor esfuerzo, con excelencia y confiando en Dios pues Él suplirá todo lo que te haga falta conforme a sus riquezas (Filipenses 4:19).
Por tanto, no se afanen diciendo: ‘¿Qué comeremos?’ o ‘¿Qué beberemos?’ o ‘¿Con qué nos cubriremos?’. Porque los gentiles buscan todas estas cosas, pero el Padre de ustedes que está en los cielos sabe que tienen necesidad de todas estas cosas. Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.
Mateo 6:31-33
Existen instituciones que te pueden ayudar. La Secretaría de Trabajo comparte ferias de empleo a nivel nacional, sitios web como LinkedIn y Empleo Conecta están constantemente compartiendo información de plazas disponibles en diferentes rubros. Puedes aprender una nueva habilidad o mayor conocimiento tomando cursos, de manera presencial o en línea, en sitios como el INFOP. También puedes encontrar más información en Cuéntanos. Si te encuentras en necesidad extrema o fuiste recientemente deportado, el gobierno tiene programas y centros de ayuda.
Por último, te recordamos que también puedes recibir ayuda de parte de una comunidad que quiere apoyarte y acompañarte. Iglesia Piedras Vivas – La Lima tiene las puertas abiertas para ti. Puedes visitarnos en La Lima los Viernes a las 7pm y Domingos a las 10am. Puedes escribirnos por WhatsApp al +504 8820-9817 o visitar nuestras redes sociales por cualquier consulta que tengas. No estás solo.
Si deseas, puedes hacer esta oración: “Padre bueno, tú me creaste con un propósito y hoy me presento delante de ti para que me abras puertas de bendición. En este momento que me encuentro sin empleo, creo en la palabra cuando dice que me cuidas, provees y sustentas. Dame paz en medio de este proceso y ayúdame a depender y confiar en ti, no en mis propias fuerzas. Amén.”
Dios te ama, te sostiene y tiene un plan con tu vida. En la iglesia puedes encontrar una comunidad de gente que ha pasado por este proceso y está dispuesta a ofrecerte una mano, un consejo y un abrazo.